BIOGRAFÍA DE LA BAILAORA DE FLAMENCO LA CHUNGA
La Chunga
Micaela Flores Amaya, La Chunga, nace en Marsella (Francia) en 1938. Siendo una niña, con solo seis años de edad baila descalza en los bares de su barrio de Barcelona y el pintor Paco Rebés quien la descubre en una de sus improvisadas actuaciones callejeras. Se convierte así en su padrino y protector, quien hará de una bailaora de renombre llevándola bajo la tutela de la mejor instructora del momento en la Ciudad Condal. Rebés es consciente de que el antedicho número de la rumbita catalana – que le da la fama danzando salerosamente despojada de sus zapatos -, no basta para cerrarr un programa.
La Chunguita conoce a Emma Maleras, su primera instructora de baile en el verano de 1953 siendo en ese momento representado un espectáculo suyo en el El Cortijo, de Barcelona. Maleras recuerda algún paso, además de no poder sufrir el calzado que siempre terminaba lanzado en cualquier esquina. Al parecer, La Chunga, no sabía los días de la semana así que su profesora recuerda como le abría la mano en abanico y se lo indicaba con os dedos.
El nombre de La Chunga empieza a aparecer en todos los diarios catalanes secundada por varios intelectuales de la época.
La artista da un salto a la Capital y se la recibe con igual cariño que en Barcelona. Los primeros tablaos están en su momento de esplendor y la actuación en El Corral de la Morería la ayuda a poder marchar a EEUU. Ya en las Américas, Sullivan, un importante empresario la contrata y presenta en Las Vegas y en diversos programas de televisión consiguiendo que los espectadores de Nueva York y Méjico literalmente “caigan rendidos a sus pies descalzos”.
En 1957 de nuevo en Barcelona, actúa en el Teatro Candilejas, junto a José Pubill, famoso guitarrista y Los Pelaos entre otros. Un años más tarde lo hará en el Gran Teatro del Liceo, homenajeando al Marqués de Cuevas. Con la intención de crear un ambiente más realista traen a más de cien gitanos de Casa Antúnez, el barrio de la bailaora aunque no fue lo esperado a pesar de los coreos a su soberana.
Es en los sesenta que recorre la Costa Brava además de sus viajes al extranjero. En 1961,Retorna en 1961, como protagonista del espectáculo Chunga Carrusel en el Teatro Victoria de Barcelona y con ella Pepín Cabrales, El Chaleco, Ramón Vélez Paquito Izquierdo, Manolo Sisón ,Juan el Pelao.
En Paris, baila para los intelectuales franceses, donde El magazine París Match ilustra su presentación en el mítico restaurante Maxim’s.
El frenesí que La Chunga transmite con su bailar, encandila al pintor Salvador Dalí, quien le propone una obra muy especial, un lienzo que dispone en el piso sobre el que deja varios tubos de pintura. Al son de la guitarra de Ramón Gómez, La Chunga baila descalza sobre la tela extendiendo el color y creando así un nuevo arte, la pintura con los pies.